Queridos hermanos: en este decimoquinto domingo del Tiempo Ordinario, la Palabra de Dios ocupa un lugar especial. Tanto Isaías como Jesús centran su mensaje en la Palabra que es enviada o sembrada en cada uno de nosotros. Usando imágenes de actividades agrícolas, Jesús nos instruirá sobre cómo debemos escuchar su Palabra y disponernos para que produzca buen fruto.
Les dejamos un enlace con las lecturas y video del Evangelio.
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